La última vez que Heesters actuó en Holanda fue en los 60, pero tuvo que abandonar entre abucheos.
Sábado 16 de febrero de 2008. Ciudad de Amersfoort en el centro de Holanda. Un día más si no fuera porque en el teatro actuaba el ciudadano local Johannes Heesters, de 104 años, quien cantó varias veces para Adolf Hitler.
La última vez que Heesters había intentado volver a cantar en Holanda fue en los años 60 cuando quiso representar al capitán anti-nazi Von Trapp en el musical "Sonrisas y lágrimas", pero fue abucheado y tuvo que abandonar el escenario.
Y es que muchos holandeses no olvidan que, después de trasladarse a Alemania en 1935 desde Amsterdam y convertirse en una figura popular en el cabaret en alemán, llegó a cantar varias veces para Hitler.
Sobre todo no le perdonan que prosiguiera su carrera meteórica después de la invasión alemana de Holanda en 1940, mientras que en su pueblo los nazis instalaban un campo de tránsito para judíos antes de ser deportados a los campos de exterminio.
En 1978 salieron a relucir además unas fotografías suyas junto a oficiales nazis en el campo de concentración de Dachau durante una visita en 1941, circunstancia que hasta entonces había ocultado.
Verguenza
El cantante se defiende afirmando que nunca apoyó las políticas nazis ni fue propagandista nazi, siendo de hecho indultado por los Aliados.
Heesters también insiste que nunca tocó para soldados nazis y que desconocía las condiciones reinantes en los campos de concentración.
Tras la guerra "estaba avergonzado conmigo mismo y todavía no he dejado de sentirme así", afirmó en su autobiografía.
Aún así, la tensión durante su actuación de este sábado se notaba: aparte de los manifestantes en su contra, todas las personas que accedieron al teatro debieron de entregar copias de sus pasaportes y pasar controles de seguridad similar al de los aeropuertos.
Mientras cerca de allí se celebró otro concierto, esta vez de composiciones de músicos asesinados en los campos nazis.
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Fuente: BBC
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