Antoni Salvà señala que los hombres cada vez están más preocupados por vivir su vejez con la mayor calidad de vida posible. El especialista recomienda un chequeo prostático anual a los mayores de 40 años
La inexistencia de una «andropausia», un momento determinado en el que se pueda decir que un hombre ha entrado en la vejez, es uno de los temas que trató la noche del viernes el urólogo Antoni Salvà en una conferencia ofrecida en el Club Diario y a la que asistieron más de 50 personas. «En el caso de la mujer es repentino pero en el hombre no es así. El proceso es mucho más pausado y larvado, por ese motivo no se detecta y cuando te das cuenta de que estás envejeciendo se hace más cuesta arriba», señaló Salvà. El especialista indicó que esta situación recibe el nombre de síndrome de Adam.
La charla, titulada `El envejecimiento del hombre´, estuvo presentada por el médico Rafael Vargas. «Es toda una serie de síntomas», comentó el especialista, que aseguró que en estos momentos «el urólogo es el médico más visitado por los hombres de más de 50 años. Incluso más que el cardiólogo».
Antonio Salvà señaló que los cambios que suelen alertar a los hombres es la pérdida de sueño y de la libido, así como el menor volumen de la erección. A diferencia de hace años, los hombres cada vez visitan más al urólogo. «Hace diez años más o menos que se quitaron la máscara y perdieron la vergüenza o el falso pudor que sentían», indica. El motivo de este cambio es que quieren «vivir su vejez con la máxima calidad de vida posible», explicó el especialista. «La gente quiere llegar a los 75 ó 80 años sin problemas, con ganas de hacer cosas y, a ser posible, con una vida sexual activa», añadió. El conferenciante subrayó que lo que se pretende evitar es la imagen del anciano «con boina, que sólo va al bar, juega a las cartas y huele a meado» porque la idea que se tiene ahora de la vejez es otra totalmente diferente.
Salvà señaló que desde hace un tiempo se están tratando estos síntomás con hormonas (testosterona). Salvà destacó, sin embargo, que este tratamiento tiene efectos secundarios importantes que no hay que olvidar, como el cáncer de próstata. «Como los tratamientos con hormonas para los síntomas de la menopausia en las mujeres tiene algunos riesgos, por eso sólo deben aplicarlo los especialistas», señaló.
Para prevenir problemas el especialista recomienda que los hombres mayores de 40 años se realicen cada año un chequeo prostático «para estar alerta al primer síntoma». De la misma manera, aconseja realizarse test de envejecimiento y medir la testosterona activa, un análisis que calificó como «clave» para determinar el envejecimiento de un hombre. «Aunque es algo que se ve a simple vista cuando entra en la consulta», comentó.
El especialista asegura que gran parte de los hombres visitan al urólogo preocupados por una disfunción eréctil. En la mayoría de los casos, cuando son hombres de más de 50 años, este problema se debe a una carencia hormonal. En el caso de los más jóvenes, la causa no suele estar relacionada con una falta de testosterona.
Fuente: diariodeibiza.es
La inexistencia de una «andropausia», un momento determinado en el que se pueda decir que un hombre ha entrado en la vejez, es uno de los temas que trató la noche del viernes el urólogo Antoni Salvà en una conferencia ofrecida en el Club Diario y a la que asistieron más de 50 personas. «En el caso de la mujer es repentino pero en el hombre no es así. El proceso es mucho más pausado y larvado, por ese motivo no se detecta y cuando te das cuenta de que estás envejeciendo se hace más cuesta arriba», señaló Salvà. El especialista indicó que esta situación recibe el nombre de síndrome de Adam.
La charla, titulada `El envejecimiento del hombre´, estuvo presentada por el médico Rafael Vargas. «Es toda una serie de síntomas», comentó el especialista, que aseguró que en estos momentos «el urólogo es el médico más visitado por los hombres de más de 50 años. Incluso más que el cardiólogo».
Antonio Salvà señaló que los cambios que suelen alertar a los hombres es la pérdida de sueño y de la libido, así como el menor volumen de la erección. A diferencia de hace años, los hombres cada vez visitan más al urólogo. «Hace diez años más o menos que se quitaron la máscara y perdieron la vergüenza o el falso pudor que sentían», indica. El motivo de este cambio es que quieren «vivir su vejez con la máxima calidad de vida posible», explicó el especialista. «La gente quiere llegar a los 75 ó 80 años sin problemas, con ganas de hacer cosas y, a ser posible, con una vida sexual activa», añadió. El conferenciante subrayó que lo que se pretende evitar es la imagen del anciano «con boina, que sólo va al bar, juega a las cartas y huele a meado» porque la idea que se tiene ahora de la vejez es otra totalmente diferente.
Salvà señaló que desde hace un tiempo se están tratando estos síntomás con hormonas (testosterona). Salvà destacó, sin embargo, que este tratamiento tiene efectos secundarios importantes que no hay que olvidar, como el cáncer de próstata. «Como los tratamientos con hormonas para los síntomas de la menopausia en las mujeres tiene algunos riesgos, por eso sólo deben aplicarlo los especialistas», señaló.
Para prevenir problemas el especialista recomienda que los hombres mayores de 40 años se realicen cada año un chequeo prostático «para estar alerta al primer síntoma». De la misma manera, aconseja realizarse test de envejecimiento y medir la testosterona activa, un análisis que calificó como «clave» para determinar el envejecimiento de un hombre. «Aunque es algo que se ve a simple vista cuando entra en la consulta», comentó.
El especialista asegura que gran parte de los hombres visitan al urólogo preocupados por una disfunción eréctil. En la mayoría de los casos, cuando son hombres de más de 50 años, este problema se debe a una carencia hormonal. En el caso de los más jóvenes, la causa no suele estar relacionada con una falta de testosterona.
Fuente: diariodeibiza.es
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