Esa es la respuesta que busca la conferencia que celebrará la ONU en León dentro de ocho meses. Su objetivo es comprobar que las iniciativas puestas en marcha en la Asamblea Mundial del Envejecimiento en Madrid hace cinco años se están cumpliendo.
En en el 2002, los gobiernos definieron una nueva agenda para enfrentar los retos del envejecimiento poblacional en el siglo XXI y se adoptó un documento clave: el plan de acción internacional. Esta declaración de intenciones comprometió a los gobiernos a diseñar y ejecutar medidas en tres temas prioritarios: las personas mayores y el desarrollo, el mejoramiento de la salud y el bienestar de este colectivo y la creación de ambientes favorables.
184 millones de mayores
Entre los datos que se pondrán encima de la mesa en el encuentro de León, uno muy ilustrativo: el número de mayores de 60 años se incrementará de forma sostenida en todos los países de la región.
Se calcula que en el 2050 habrá 184 millones de adultos mayores en los 55 países de la Unece. Con esta proyección, argumenta la comisión de Naciones Unidas, son necesarias políticas urgentes, como las que ayuden a equilibrar porcentajes como el que revela que ocho de cada diez mujeres no acceden a pensiones de vejez ni tienen una cobertura de salud adecuada.
Políticas audaces y eficientes
Expertos en población hablan de retos y entre ellos citan «políticas públicas audaces, de amplia cobertura, solidarias y eficientes, que no sólo focalicen su accionar en los adultos mayores, sino que también aporten a construir una sociedad en la que la calidad de vida en la vejez sea forjada desde la juventud», explicó en la Asamblea de Madrid el oficial de Asuntos de Población José Miguel Guzmán.
En el encuentro de noviembre se abundará sobre el objetivo de aplicar un instrumento práctico para ayudar a los políticos a considerar las prioridades básicas asociadas al envejecimiento. Entre las propuestas que gravitarán sobre los grupos de trabajo destaca una, la de brindar oportunidades de empleo a las personas de edad que deseen trabajar y puedan hacerlo.
Fuente: Diario de León
En en el 2002, los gobiernos definieron una nueva agenda para enfrentar los retos del envejecimiento poblacional en el siglo XXI y se adoptó un documento clave: el plan de acción internacional. Esta declaración de intenciones comprometió a los gobiernos a diseñar y ejecutar medidas en tres temas prioritarios: las personas mayores y el desarrollo, el mejoramiento de la salud y el bienestar de este colectivo y la creación de ambientes favorables.
184 millones de mayores
Entre los datos que se pondrán encima de la mesa en el encuentro de León, uno muy ilustrativo: el número de mayores de 60 años se incrementará de forma sostenida en todos los países de la región.
Se calcula que en el 2050 habrá 184 millones de adultos mayores en los 55 países de la Unece. Con esta proyección, argumenta la comisión de Naciones Unidas, son necesarias políticas urgentes, como las que ayuden a equilibrar porcentajes como el que revela que ocho de cada diez mujeres no acceden a pensiones de vejez ni tienen una cobertura de salud adecuada.
Políticas audaces y eficientes
Expertos en población hablan de retos y entre ellos citan «políticas públicas audaces, de amplia cobertura, solidarias y eficientes, que no sólo focalicen su accionar en los adultos mayores, sino que también aporten a construir una sociedad en la que la calidad de vida en la vejez sea forjada desde la juventud», explicó en la Asamblea de Madrid el oficial de Asuntos de Población José Miguel Guzmán.
En el encuentro de noviembre se abundará sobre el objetivo de aplicar un instrumento práctico para ayudar a los políticos a considerar las prioridades básicas asociadas al envejecimiento. Entre las propuestas que gravitarán sobre los grupos de trabajo destaca una, la de brindar oportunidades de empleo a las personas de edad que deseen trabajar y puedan hacerlo.
Fuente: Diario de León
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