El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el sábado que un ataque estadounidense contra los tres principales sitios nucleares de Irán: Natanz, Isfahan y Fordow había llevado a la "destrucción" de sus principales instalaciones de enriquecimiento. Más tarde, los medios iraníes reconocieron que parte del sitio de Fordow había sido "atacado por ataques enemigos".
"Todo el mundo escuchó esos nombres durante años mientras construían esta horrible empresa destructiva. Nuestro objetivo era la destrucción de la instalación de enriquecimiento nuclear de Irán", dijo Trump el sábado por la noche. "Los ataques fueron un éxito militar espectacular".
La decisión de involucrar directamente a Estados Unidos se produce después de más de una semana de ataques de Israel contra Irán, que han tomado medidas para erradicar sistemáticamente las defensas aéreas y las capacidades de misiles ofensivos del país, al tiempo que dañan sus instalaciones de enriquecimiento nuclear.
Pero enterrada bajo una montaña y protegida por baterías antiaéreas, se creía que la planta de enriquecimiento de combustible nuclear de Fordow estaba más allá del límite de los ataques aéreos israelíes. La desconexión de Fordow se considera fundamental para evitar que Irán adquiera armas nucleares después de que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) descubriera que el sitio había enriquecido uranio al 83,7%, cerca del 90% necesario para las armas nucleares.
Guardian graphic. Sources: Michael A. Levi, Cargenie Endowment for International Peace. US Air Force
Israel ha apelado a Trump para que le coloque bombas antibúnker estadounidenses, el GBU-57 Massive Ordnance Penetrator de 30.000 libras, que utiliza su peso y fuerza cinética para alcanzar objetivos profundamente enterrados y luego explotar. Solo puede ser lanzado por el bombardero furtivo B-2, que solo se encuentra en el arsenal estadounidense.
La bomba lleva una ojiva convencional, y se cree que puede penetrar a unos 200 pies (61 metros) por debajo de la superficie antes de explotar, y las bombas pueden ser lanzadas una tras otra, perforando efectivamente más y más profundo con cada explosión sucesiva.
Un funcionario estadounidense dijo a Reuters que los bombarderos B-2 estuvieron involucrados en los ataques contra los sitios nucleares de Irán y Trump le dijo a Fox News que se lanzaron seis bombas destructoras de búnkeres sobre Fordow, mientras que 30 misiles Tomahawk fueron disparados contra otros sitios nucleares, incluido Natanz.
Según se informa, fue el primer uso en combate del GBU-57 Massive Ordnance Penetrator.
Después de los ataques, Benjamín Netanyahu elogió la medida de Trump y agregó que el "impresionante y justo poderío de Estados Unidos cambiará la historia". El primer ministro israelí dijo en un discurso en video que Estados Unidos "ha hecho lo que ningún otro país en la Tierra podría hacer".
A su vez, Trump agradeció a Netanyahu, diciendo que "trabajaron como un equipo como quizás ningún equipo ha trabajado antes", y recorrieron un largo camino para "borrar esta horrible amenaza a Israel".
Sin embargo, dada su fortificación, probablemente pasarán días, si no más, antes de que se conozca el impacto de los ataques en Fordow.
Guardian graphic. Source: Institute for Science and International Security, Planet Labs
Jonathan Yerushalmy y Agencias
The Guardian



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