En la Feria Internacional del Libro de Santiago (FILSA) 2018, se presentó el 31 de octubre pasado el destacado cantautor Nano Stern.
Uno de los temas es éste, en el que fue acompañado por Simón González y que fue dedicado, como todo el concierto, a la incansable defensora de los derechos humanos, recientemente fallecida, Ana González
Muchas veces estoy triste, y ya no encuentro la razón
para seguir adelante cuando todo tira atrás
Muchas veces estoy solo con esta triste canción
siento que se va la vida como cuando falta el sol
y miro hacia el cielo, no veo la luz
y toco la tierra, no siento el calor
y viene un amigo y me hace recordar
que la vida es un gran regalo,
que la vida es un gran regalo
Muchas veces estoy triste y ya no encuentro la razón
para seguir adelante cuando todo tira atrás
muchas veces estoy solo con esta triste canción
siento que se va la vida como cuando falta el sol
y miro hacia el cielo, no veo la luz
y toco la tierra, no siento el calor
y viene un amigo y me hace recordar
que la vida es un gran regalo
que la vida es un gran regalo
Y miro hacia el cielo, no veo la luz
y toco la tierra, no siento el calor
y viene la vida y me hace recordar
que un amigo es un gran regalo
y miro hacia el cielo, no veo la luz
y toco la tierra, no siento el calor
y vienen todos ustedes,
el Simón, viene la Magda, vienen todos juntos
en este país un poco raro
en este país en que no salen en los diarios
que una mujer, a pesar de todo, siguió sonriendo
buscando triste, con ganas de llorar, pero sonriendo.
Tienen que venir los gringos a poner en las portadas
de sus diarios, para que aquí se den cuenta.
Yo quisiera aprovechar este último momento, dedicarle esta canción, este concierto, este tiempo, a la memoria
de Anita González...
y eso me hace recordar
que la vida es un gran regalo
que la vida es un gran regalo
que la vida es un gran reegaaaaloooooo!
Con 50 años de vida en común ya estamos transitando por este “Camino otoñal”, descubriendo, día a día, la alegría de vivir y tratando de colaborar en la construcción de una sociedad más justa e inclusiva. El Otoño, al igual que el Adulto mayor, tiene su belleza y la estamos conociendo. Pensamos que hay mucho camino que recorrer y todavía tenemos una mirada optimista de la vida, consciente que junto a las dificultades del diario vivir, hay desafíos que afrontar y oportunidades para servir.
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