La inflación de los precios en Reino Unido está llevando a muchas familias a tener que elegir entre comer o pagar facturas. Ante esta situación ha surgido el movimiento ciudadano 'Don't pay' (no pagues) con el que invitan a no pagar la factura eléctrica a partir de octubre, mes en el que suban todavía más los precios.
Desde el gobierno, se han anunciado un plan para hacer frente a esta crisis energética. Se congelará la factura media de los hogares en 2.500 libras (2.872 euros al año) desde el 1 de octubre y durante dos años, hasta 2024.
Pero la iniciativa no acaba de convencer a todos. Desde el partido laborista, creen que esto no ayudará a menguar el gasto de las familias, y se preguntan (dada la situación económica) quién pagará estas ayudas que ha anunciado Liz Truss.
Comments