A 40 años de su muerte, Jim Morrison, líder de la banda californiana de rock The Doors, continúa generando fanatismo y controversia en París, la ciudad donde pasó sus últimos días.
Un bar dedicado a la banda recibió una carta advirtiendo que el grupo "no quiere dar la impresión de que aprueba su establecimiento ni el consumo de alcohol".
Parece irónico, teniendo en cuenta que Morrison formó parte del movimiento psicodélico.
Conozca las huellas del emblemático grupo - y la polémica - que aún perviven en París en este video de Gerardo Lissardy, de BBC Mundo.
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