Reynosa, Tamaulipas.- Las personas en edad de plenitud, llamadas también adultos mayores y con afecto ancianitos, son blanco de rechazo, discriminación y faltas de respeto por su condición física y natural impedimento gradual natural que les representa su estado. Sin embargo, quienes practican esa clase de discriminación han olvidado que los adultos mayores cuentan con la experiencia acumulada por los años y representan un desafío vivo para quienes aspiran a vivir una larga existencia, en muchos casos sueño que es cortado al morir joven y no llegar a la vejez. Don Enrique Vallejo Rodríguez, tiene 85 años de edad y reconoció con tristeza al hablar con “La Prensa” que prevalece rechazo y marginación hacia los ancianos por parte de las personas jóvenes. “Nos rechazan y son en su mayoría gente nueva (jóvenes), pero no saben que nosotros tenemos mucha energía, experiencia y podemos colaborar y ser activos, quien discrimina a un viejito, no sabe o no quiere aceptar la idea de que ellos se ve...
Con 50 años de vida en común ya estamos transitando por este “Camino otoñal”, descubriendo, día a día, la alegría de vivir y tratando de colaborar en la construcción de una sociedad más justa e inclusiva. El Otoño, al igual que el Adulto mayor, tiene su belleza y la estamos conociendo. Pensamos que hay mucho camino que recorrer y todavía tenemos una mirada optimista de la vida, consciente que junto a las dificultades del diario vivir, hay desafíos que afrontar y oportunidades para servir.