Tras el derrocamiento del presidente sirio Bashar al-Assad, la preocupación por los exiliados aumenta. El presidente de Turquía anunció la reapertura de un paso fronterizo, cerrado desde 2013, para facilitar el retorno de los refugiados sirios a su país. Muchos de ellos se movilizaron hacia la frontera tras la caída de Al-Assad, ansiosos por regresar a su hogar. Sin embargo, muchos otros dudan sobre regresar a Siria, a causa de los rebeldes que tomaron el poder.
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