Conan acompaña al sacerdote Joei Yoshukini en sus oraciones diarias.
Un templo budista en Japón ha visto un considerable aumento en la visita de sus feligreses, desde que la mascota del recinto los acompaña en sus oraciones.
Conan, un chihuahua de dos años, se sienta en sus patas traseras mientras junta las delanteras a la altura de su hocico, como en forma de rezo.
"Conan empezó a adoptar la posición de oración cada vez que quería una recompensa", comenta un sacerdote del templo de Jigenin en la isla de Okinawa.
Sin embargo otro sacerdote, Joei Yoshukini, espera más del perro. Él aspira a que Conan medite. Sin embargo, reconoce que "es poco probable que podamos cruzar sus piernas".
Este perro de pelo negro con un collar marrón suele sentarse junto a Yoshikuni al frente del altar y mira al frente donde está la estatua del Buda.
El más popular
Cuando el sacerdote empieza a cantar y a juntar las palmas, Conan lo sigue, mientras los asistentes miran a la pareja con curiosidad.
"¡Es tan gracioso lo que hace!", comenta Kazuko Oshiro, de 71 años, que frecuenta el templo desde hace más de 25 años.
"Él se molesta cuando alguien le quita su asiento. Puede que piense que es un lugar especial", agrega Oshiro.
Hoy en día Conan se ha hecho tan popular que la gente visita el templo sólo para tomarle fotos.
Yoshikuni cree que el recinto aumentó el número de visitas en un 30%, cuya mayoría se trata de turistas jóvenes.
Fuente: BBC
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