«Una alimentación insuficiente condiciona, a veces, la movilidad y la emancipación. Además, el tratamiento farmacológico incide en que puedan realizar una dieta equilibrada». Así resume la catedrática en nutrición, Camino García Fernández, parte de su intervención hoy en el Club de Prensa del Diario de León. «La vejez es una etapa crítica en la vida, en la que hay que vigilar bien la alimentación porque es un factor de salud importante, tanto como el ejercicio físico». Uno de los problemas a los que se enfrentan los mayores es la desnutrición.
«Suelen acabar haciendo una alimentación cada vez más monótona. Con los años vuelven a la niñez, con la ingesta de alimentos que requieren una escasa elaboración, como galletas, y eso hace que tengan una alimentación no variada con carencia de minerales y vitaminas. Muchos dejan de comer carne, con lo que aumenta la anemia o la vitamina B. Todas estas carencias hacen que el estado físico disminuya». García Fernández da las claves: seguir la dieta mediterránea, con verduras, fruta y legumbres.
El diario de León
«Suelen acabar haciendo una alimentación cada vez más monótona. Con los años vuelven a la niñez, con la ingesta de alimentos que requieren una escasa elaboración, como galletas, y eso hace que tengan una alimentación no variada con carencia de minerales y vitaminas. Muchos dejan de comer carne, con lo que aumenta la anemia o la vitamina B. Todas estas carencias hacen que el estado físico disminuya». García Fernández da las claves: seguir la dieta mediterránea, con verduras, fruta y legumbres.
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