150.000 casas sin electricidad en nueve estados diferentes.
Más de 2.200 vuelos cancelados en los aeropuertos de Washington, Filadelfia y Nueva York. 1.000 en Ilinois.
400.000 trabajadores que no han ido al trabajo.
La tormenta de nieve sigue golpeando el centro y el este de Estados Unidos, aunque a estas horas se desplaza hacia el Atlántico dirección Nueva Inglaterra.
El algunos puntos los grosores se han acercado al medio metro.
En Washington, se esperaba a esta tormenta, bautizada como Saturno, con los dedos cruzados.
Se habían cerrado a cal y canto edificios públicos y escuelas.
Obama incluso había retrasado su enfrentamiento decisivo con los republicanos sobre el presupuesto.
Pero de momento, las temperaturas no están siendo tan bajas y la nieve se mezcla con el agua. Los grosores son poco significativos.
Mañana, lo peor, ya habrá pasado.
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