El largometraje "André a Cara e a Coragem" de Xavier de Oliveira compitió hace 35 años en el Festival de Cine de Karlovy Vary. En Uherské Hradiste, el brasileño presentó otras dos películas suyas: "Adágio ao Sol" y "Gargalhada Final". Radio Praga conversó con el realizador en esta ocasión.
La vejez ha sido uno de los lemas principales de la presente Escuela de Cine de Verano de Uherské Hradiste. ¿Cree Ud. que es un tema atractivo para un cineasta?
"Yo creo que el tema de la vejez, el envejecimiento es muy interesante y muy apropiado para los días de hoy. Lo digo porque en Brasil hubo durante muchos años una especie de la dictadura de la juventud. En Brasil ser joven era ya una forma de aceptación. Por el contrario, una persona mayor estaba al costado, era una persona que ya no producía más, que ya no consumía, por lo tanto una especie de algo inútil para la sociedad. Eso ya pasó. Hoy la cosa ha cambiado bastante. Existe todo un aparato que debe restablecer el respeto hacia la vejez. Yo tengo en mi país una serie de privilegios. Por ejemplo, en el cine pago la mitad. Con el desarrollo tecnológico y científico la expectativa de vida en Brasil ha superado los setenta años, por eso se presta más atención a la gente mayor. Así que encuentro muy oportuno que un festival acá trate del tema de la vejez. Lo veo como un síntoma interesante de que los tiempos cambian. Creo también que en Europa siempre se respetaba más a la gente mayor que en América Latina".
¿Cuando realiza una película la hace para el público brasileño o piensa también en el espectador en el exterior?
"Sinceramente, pienso en el público brasileño. Es ya tan difícil conquistar al público brasileño. Según dije aquí en una charla sobre la cinematografía brasileña, Brasil es un país muy diversificado, tiene 180 millones de habitantes. ¡Es mucho, es un continente! Entonces, es curioso porque un filme que tiene éxito en una determinada región de Brasil no lo tiene en otra. La gente de una región se ríe de ciertos chistes en mis guiones, y las personas de otra región no se ríen. Es muy difícil alcanzar a todo el público brasileño de modo que no pienso en los espectadores de otros países. Es evidente que si hago una película de carácter universal, la cosa se vuelve más fácil porque todos los seres humanos somos iguales".
El festival de Uherské Hradiste tiene una sección dentro de la cual se proyectan diez películas "que sacudieron al mundo", que significaron una revolución en la cinematografía mundial. ¿Qué películas serían esas según su criterio?
"El cine es simplemente un arte fantástico. Creo que es el arte más importante del último siglo. Tengo un amor profundo hacia el cine, es mágico ver un filme en una sala de exhibiciones, las luces se apagan, una pantalla inmensa, no se puede sustituir por nada, ni por la televisión donde ves un filme, de repente suena el teléfono, hay una pausa para la publicidad ... ¿Cuáles serían entonces los grandes filmes que impactaron al mundo? Es tan personal. Por ejemplo, ´Ciudadano Kane´, de Orson Welles, es una película extraordinaria por la revolución transformada en el lenguaje. Quisiera citar también ´Luces de la ciudad´, de Charlie Chaplin, película extraordinaria por su capacidad de contar las historias con las imágenes. Me fascinan las películas de Stanley Kubrick, ´2001: Una odisea del espacio´, es un filme que he visto treinta o cuarenta veces. Una película revolucionaria para mí personalmente es aquella que me conmueve".
Fuente: radio Praha
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