Ella es un ejemplo de que la tercera edad no tiene por qué ser un impedimento para ejercitarse.
Vestida con una sudadera, Libia González llega todas las tardes al canal Cablecentro donde emite en directo un programa de aeróbicos para las personas adultas mayores. Allí realiza ejercicios con movimientos delicados y al mismo tiempo atiende las llamadas de los televidentes.
Vestida con una sudadera, Libia González llega todas las tardes al canal Cablecentro donde emite en directo un programa de aeróbicos para las personas adultas mayores. Allí realiza ejercicios con movimientos delicados y al mismo tiempo atiende las llamadas de los televidentes.
A sus 72 años, la directora del programa Knitas al Aire, siente tantas ganas de hacer ejercicio como cuando jugaba baloncesto en el colegio María Auxiliadora en Bogotá. Y aunque su cuerpo no es el mismo de hace cuarenta años, pues la silueta delgada de su juventud se borró con el tiempo, y el tono dorado de su cabello se perdió entre las canas, Libia no se acompleja por su cambio físico y se siente vital para ejercitarse.
Para ella la vejez representa una etapa maravillosa en la que ha logrado el sueño más grande: ayudar a las personas. "Fui una de las primeras voluntarias en hospitales de Lady Ping en Colombia ¿dice Libia¿. En ese tiempo pensaba que quería ayudar a la gente más vulnerable. Hoy me doy cuenta que lo he logrado con la gimnasia que dirijo, porque los viejitos estamos olvidados. Me gusta trabajar para entretenerlos".
'Afuera la pereza'
Libia todos los días organiza la rutina para sus cerca de 200 mil televidentes a quienes "ayuda a sentirse saludables y capaces de moverse".
Desde el 1989 trabajó en el centro de salud de Suba, donde descubrió su gusto por hacer y enseñar gimnasia. Sin embargo, nunca pensó que llegaría a la televisión, donde lleva más de tres años.
Según esta bisabuela, "la edad no debe ser un problema. Por ejemplo a mí me ha ensanchado el cuerpo, pero eso no me molesta porque estoy bien de salud. La vejez es algo natural y uno debe aceptarla. Por eso yo le digo a mi público que no hay que pelear con la cana ni con la arruga, y si uno se siente mal por eso, entonces no debe mirarse al espejo".
Libia todos los días camina, hace gimnasia con sus amigas o visita algunos hogares geriátricos para motivar a los ancianos a hacer ejercicio. En las tardes, luego de su almuerzo y la siesta va al canal donde emite su programa de ejercicios. Allí realiza treinta minutos de gimnasia apropiada para su edad.
"Yo le recomiendo a los abuelitos que hagan media hora de ejercicio o que caminen despacito para que no vayan a causarse lesiones, pero eso sí que no se queden quietos porque el sedentarismo y la mala alimentación trae enfermedades", comenta Libia.
El ejercicio solo aporta beneficios al cuerpo
Disminuye el dolor y ayuda en la recuperación de enfermedades crónicas.
Eleva la producción de endorfinas, mejora el sueño, favorece la memoria y la concentración, disminuye la depresión y mejora la autoestima.
Aumenta los niveles de colesterol bueno (HDL) y disminuye los del malo (LDL).
Fortalece el sistema de defensa del organismo.
Evita que las articulaciones se deformen o se peguen.
Fortalece los huesos.
Reduce la tensión arterial y ayuda a controlarla.
Disminuye el estreñimiento y regula el apetito.
Ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre.
Ayuda a bajar de peso y a mantenerlo. Es el complemento ideal de una dieta balanceada.
Envíe sus experiencias en actividad física y buenos hábitos a la sección ¡Tan vivos!, con datos personales (nombre, edad, teléfono, ocupación, composición familiar y pasatiempos) a los correos electrónicos sonia_perilla@eltiempo.com.co y adrgar@eltiempo.com.co o a la avenida El Dorado No. 59-70, redacción Vida de Hoy.
Fuente: El tiempo de Colombia
¡Qué sana envidia!
Acabamos de venir con Ruth de hacer un poco de gimnasia
Ánimo para enfrengtar dce mejor manera la vejez
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