Una huelga general de 24 horas convocada por los principales sindicatos griegos, ha detenido el transporte público en toda Grecia, provocando también la cancelación de más de 100 vuelos en el aeropuerto internacional de Atenas.
Además han dejado de operar las comunicaciones ferroviarias y marítimas. Tampoco funcionan los autobuses y trolebuses, y el metro, por su parte, está paralizado parcialmente.
En el paro participan los empleados de la banca, clínicas, escuelas, universidades, compañías estatales, tiendas y empresas privadas. Además, las cadenas televisivas no emiten desde la mañana de este miércoles.
En esta situación la policía se ha movilizado por temor a que las protestas masivas se tornen violentas. Asimismo, en las calles de la capital ya han ocurrido algunos enfrentamientos, cuando un grupo de manifestantes han lanzado piedras y cócteles molotov contra las fuerzas antidisturbios. Los agentes han utilizado gases lacrimógenos para dispersarles.
Grecia vive su primera huelga general del año (tras las 10 celebradas en el 2010) contra las medidas de austeridad económica adoptadas por el gobierno, como consecuencia del rescate financiero al que se vio obligado a acudir el país el año pasado.
Los representantes de los sindicatos han anunciado que planean organizar cerca de 60 manifestaciones en otras ciudades griegas
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