Ellas apoyan la crianza de los nietos, cocinan, limpian, dan consejos y dinero
Si son jóvenes, son más valoradas por su mayor capacidad productiva
La Nación (Costa Rica)
27 Enero 2008
Las abuelas tienen un papel muy activo en el sostén de las familias de hoy. Ellas crían nietos, alistan sus comidas, limpian la casa, dan consejos e, incluso, aportan dinero a sus hogares.
Su trabajo es mucho más valorado cuando son abuelas "jóvenes" pues esto les permite ser "más productivas".
Un estudio de la Escuela de Nutrición de la Universidad de Costa Rica profundizó en el papel social que cumplen las abuelas en familias del área metropolitana.La investigación se realizó con entrevistas a profundidad a 75 mujeres de los cantones de La Unión y Montes de Oca.
El grupo estuvo conformado por mujeres de entre 50 y 85 años, con un promedio de uno a cinco nietos en sus hogares.
El 75% de las entrevistadas tenía estudios primarios incompletos, y un 85% señaló que su ocupación eran las labores del hogar.
El estudio determinó que entre más jóvenes, las abuelas asumen más responsabilidades en las familias.
"Ellas dan apoyo mediante trabajo físico e, incluso, económico", comentó la investigadora Patricia Sedó Masís.
Sin embargo, la escolaridad de estas mujeres marca una diferencia en el tiempo que dedican al cuidado de los otros.
"Las abuelas jóvenes con mayor escolaridad están aún involucradas en el mundo del trabajo y su participación es menor en los hogares", explicó Sedó, quien realizó el estudio junto con la investigadora Marisol Ureña Vargas.
En sus entrevistas, determinaron que las abuelas tienen más injerencia en las familias de sus hijas que de sus hijos.
"Algunas abuelas se involucran más en la crianza de sus nietos cuando los padres son muy jóvenes, porque consideran que sus hijos no tienen experiencia", dijo.
Sin embargo, en esta relación no todo es color de rosa.El estudio determinó que se presentan contradicciones, sobre todo cuando se trata de choques de pensamiento generacional sobre la visión de patrón de crianza y límites de participación, entre otros.
Rol tradicional. Otro aspecto que evidenció el estudio es la percepción de que las abuelas "tienen la obligación" de ayudar en la casa. "Esto se explica por el rol asignado tradicionalmente a la mujer.
Sin embargo, este trabajo no es una carga para las abuelas cuando ellas disfrutan de sus tareas", dijo.La investigación también destacó el aporte de las abuelas en la formación de hábitos de alimentación de sus familias.
"Muchas seleccionan los alimentos, los preparan y brindan educación tradicional a la familia", comentó Sedó."Usan recetas tradicionales, acompañan a sus nietos en la mesa y procuran transmitir sus conocimientos culinarios", agregó.
El estudio no se enfocó en los abuelos, pero las investigadoras sí detectaron que su papel es más pasivo en el seno de las familias.Sobre las abuelas, Sedó comentó que existe una gran oportunidad de beneficiar a las familias a través de ellas.
"Una comunidad que brinde espacios para educar a sus abuelas en temas como alimentación saludable mejorará, sin duda, la calidad de vida de sus familias", comentó la investigadora de la UCR.
Recordó que los adultos mayores son un grupo creciente en la población costarricense. Datos del Centro Centroamericano de Población señalan que un 8% de los ticos tiene 60 o más años. Para el 2025 esta cifra llegará al 10% y, para el 2050, representará un 26% de la población.
Fuente: RLG
Si son jóvenes, son más valoradas por su mayor capacidad productiva
La Nación (Costa Rica)
27 Enero 2008
Las abuelas tienen un papel muy activo en el sostén de las familias de hoy. Ellas crían nietos, alistan sus comidas, limpian la casa, dan consejos e, incluso, aportan dinero a sus hogares.
Su trabajo es mucho más valorado cuando son abuelas "jóvenes" pues esto les permite ser "más productivas".
Un estudio de la Escuela de Nutrición de la Universidad de Costa Rica profundizó en el papel social que cumplen las abuelas en familias del área metropolitana.La investigación se realizó con entrevistas a profundidad a 75 mujeres de los cantones de La Unión y Montes de Oca.
El grupo estuvo conformado por mujeres de entre 50 y 85 años, con un promedio de uno a cinco nietos en sus hogares.
El 75% de las entrevistadas tenía estudios primarios incompletos, y un 85% señaló que su ocupación eran las labores del hogar.
El estudio determinó que entre más jóvenes, las abuelas asumen más responsabilidades en las familias.
"Ellas dan apoyo mediante trabajo físico e, incluso, económico", comentó la investigadora Patricia Sedó Masís.
Sin embargo, la escolaridad de estas mujeres marca una diferencia en el tiempo que dedican al cuidado de los otros.
"Las abuelas jóvenes con mayor escolaridad están aún involucradas en el mundo del trabajo y su participación es menor en los hogares", explicó Sedó, quien realizó el estudio junto con la investigadora Marisol Ureña Vargas.
En sus entrevistas, determinaron que las abuelas tienen más injerencia en las familias de sus hijas que de sus hijos.
"Algunas abuelas se involucran más en la crianza de sus nietos cuando los padres son muy jóvenes, porque consideran que sus hijos no tienen experiencia", dijo.
Sin embargo, en esta relación no todo es color de rosa.El estudio determinó que se presentan contradicciones, sobre todo cuando se trata de choques de pensamiento generacional sobre la visión de patrón de crianza y límites de participación, entre otros.
Rol tradicional. Otro aspecto que evidenció el estudio es la percepción de que las abuelas "tienen la obligación" de ayudar en la casa. "Esto se explica por el rol asignado tradicionalmente a la mujer.
Sin embargo, este trabajo no es una carga para las abuelas cuando ellas disfrutan de sus tareas", dijo.La investigación también destacó el aporte de las abuelas en la formación de hábitos de alimentación de sus familias.
"Muchas seleccionan los alimentos, los preparan y brindan educación tradicional a la familia", comentó Sedó."Usan recetas tradicionales, acompañan a sus nietos en la mesa y procuran transmitir sus conocimientos culinarios", agregó.
El estudio no se enfocó en los abuelos, pero las investigadoras sí detectaron que su papel es más pasivo en el seno de las familias.Sobre las abuelas, Sedó comentó que existe una gran oportunidad de beneficiar a las familias a través de ellas.
"Una comunidad que brinde espacios para educar a sus abuelas en temas como alimentación saludable mejorará, sin duda, la calidad de vida de sus familias", comentó la investigadora de la UCR.
Recordó que los adultos mayores son un grupo creciente en la población costarricense. Datos del Centro Centroamericano de Población señalan que un 8% de los ticos tiene 60 o más años. Para el 2025 esta cifra llegará al 10% y, para el 2050, representará un 26% de la población.
Fuente: RLG
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